Azcón asegura que Aragón es la comunidad a la que más va a perjudicar el pacto del PSOE con los independentistas, porque se nos excluye del fondo de compensación que se va a duplicar y, de cara a 2025, el Estado ya prevé reducir las transferencias a nuestro territorio en 87 millones de euros. Por eso, el presidente anima al consenso y se muestra dispuesto, incluso, a reclamar la bilateralidad económica que plantea nuestro Estatuto de Autonomía y que exigen Chunta y el PAR.
El presidente Azcón se muestra optimista, ya que durante el pleno ningún partido político se ha negado explícitamente a negociar ese gran pacto aragonés, aunque todos han defendido sus matices o han impuesto condiciones. El principal grupo de la oposición, el PSOE, ha defendido en las Cortes la postura que comparten los socialistas de Zaragoza y Teruel, fieles a Javier Lambán. A diferencia de sus compañeros de Huesca y de la dirección nacional del partido, rechazan frontalmente la financiación singular para Cataluña. Su portavoz en las Cortes, Mayte Pérez, recibe el ofrecimiento de Azcón con esperanza y cautela, dispuesta a trabajar hacia el consenso.
El portavoz de Vox, Alejandro Nolasco, ha sido el más crítico, tanto con el PP de Azcón como con los socialistas. Acusa a ambos de haber alimentado un monstruo durante décadas y cree que la ruina provocada por el cupo catalán conducirá a una gran subida de impuestos. El portavoz de Aragón Existe, Tomás Guitarte, exige que en el pacto por la financiación se incluya también una compensación por el déficit histórico que ha sufrido Teruel, mientras que el representante de Izquierda Unida, Álvaro Sanz, condiciona su apoyo reclamando que termine el dumping fiscal y no se confronte con otros territorios.
Chunta y el PAR también están dispuestos a unirse a ese gran pacto planteado por Azcón, insistiendo en que Aragón no puede renunciar a la bilateralidad.