Todos los sectores económicos se han visto afectados en mayor o menor medida por la crisis sanitaria, aunque en lo que respecta a la construcción apenas se ha notado. Las obras solo pararon quince días el pasado mes de abril y las empresas han podido sacar adelante los trabajos que tenían contratados.
Aunque durante este tiempo han tenido que hacer frente a alguna baja laboral por confinamientos puntuales de sus empleados, esto no ha tenido mayores consecuencias en los trabajos comprometidos.
Sin embargo, el presidente de la Asociación Provincial de Constructores, Pedro Rodríguez, sí que ve con incertidumbre los próximos meses porque no tiene claro el camino que van a seguir las instituciones a la hora de consignar las partidas presupuestarias destinadas a obras públicas.