La ola de calor que esta semana podría traer hasta 44 grados a diversos puntos de Aragón también afectará a la agricultura. Mientras que la práctica totalidad de los cereales de secano ya se han recogido, en áreas como el corredor del Ebro y la zona de Monegros, las altas temperaturas suponen un riesgo para cultivos de regadío como el maíz o la alfalfa, que necesitarán un aporte extraordinario de agua.
Por otro lado, el calor continúa vaciando los embalses de Aragón, que ahora mismo, con 5.080 hectómetros cúbicos de agua, se encuentran al 64,2% de su capacidad. Son 11,4 puntos porcentuales menos que hace un año y 12,5 menos que la media de los últimos cinco años.
El presidente de Comunidad General de Riegos de Alto Aragón, César Trillo, recuerda que están siendo meses muy secos y las altas temperaturas provocan que el agua del deshielo se evapore antes de llegar a los pantanos. Por eso, afirma que en algunos regadíos menos preparados, aquellos que aún no han incorporado las últimas tecnologías para aprovechar mejor el agua, van a tener dificultades.