El alcalde de Grañén, el popular Carlos Sampériz, ha mantenido un encuentro con Isaac Claver, presidente de la DPH, para trasladarle la inquietud vecinal por los recientes acontecimientos vividos en el municipio. La presencia de un acosador reincidente, detenido por la guardia civil y puesto en libertad horas después, ha causado una reacción de alarma que se suma a las numerosas denuncias de alcaldes comarcales por el clima de inseguridad que detectan en los Monegros.
Sampériz anunció al presidente de la DPH una iniciativa puesta en marcha por varias corporaciones municipales que se traducirá en un escrito dirigido al jefe de la comandancia de la Guardia Civil de Huesca para reclamar una mayor presencia de sus agentes en el territorio monegrino. El cierre de cuarteles de la Guardia Civil en la comarca durante las últimas décadas ha derivado en una ratio de 1 agente por cada 1200 habitantes, una cifra proporcional sensiblemente más baja que en zonas como el bajo Aragón o el área pirenaica. Los alcaldes insisten en que la presencia de la institución armada es ya puramente testimonial.
La iniciativa impulsada por alcaldes afectados sigue el espíritu de la declaración institucional aprobada días atrás en la Diputación Provincial de Huesca, que reivindicaba la imperiosa necesidad de un mayor número de agentes para prevenir y dar respuesta al clima de inseguridad instalado en el mundo rural del Alto Aragón. En cumplimiento del mandato del pleno provincial, Isaac Claver, dirigió una carta al ministro del Interior donde se señalaba que en su calidad de presidente de la institución rogaba encarecidamente la inclusión de la provincia de Huesca en el plan temporal destinado a incrementar la presencia de la Guardia Civil en el medio rural.