Los residentes y trabajadores de las residencias de Grañén y Benabarre estaban ya vacunados hace tiempo, por lo que la entrada del covid a los centros les ha pillado por sorpresa. El brote de Benabarre afecta ya a 29 residentes y cuatro trabajadores. La mayoría presentan síntomas leves o son asintomáticos, aunque hay tres que han tenido que ser hospitalizados. José Antonio Benabarre, gerente de la residencia, indica que la evolución de los contagiados es estable o leve.
Sin embargo, la cifra de contagios podría ir a más ya que el resultado de algunas PCR practicadas no ha sido concluyente. Salud Pública ya ha visitado el centro, donde se ha empezado a aplicar el protocolo covid sectorizando las zonas y controlando todos los contactos.
También otro brote con tres positivos ha obligado a cerrar la residencia Parque San Julián de Grañén a las visitas. Los afectados son tres residentes, todos vacunados y sin síntomas o con sintomatología leve.