Sevilla | 23.11.2023 12:47
Un 23 de noviembre de 1248, el Rey Fernando III tomaba la ciudad islámica de Isbilya dando fin a más de 500 años de dominación musulmana en la ciudad y Sevilla volvía a ser cristiana. Desde entonces, cada 23 de noviembre se recuerda esta reconquista, pero este año es especial, pues se cumplen 775 años de esta histórica gesta que no han querido perderse los sevillanos.
Por este 775 aniversario se ha celebrado esta mañana la procesión de la espada del Rey Santo llamada Lobera que ha salido de la Capilla Real y ha sido portada por el alcalde en una procesión que ha trascurrido recorriendo el exterior la Catedral. La concejal más joven de la corporación, Blanca Gastalver ha portado el pendón de la ciudad.
En ese cortejo, han salido también en procesión las tablas Alfonsíes y la Virgen de las Batallas, que, a su paso por la ya restaurada Parroquia del Sagrario, eran recibidos por Cantigas de Santa María a cargo del Grupo Artefactum.
También la Orden de San Clemente ha formado parte de un cortejo que ha salido más allá de las 10,00h de la mañana de la tumba de Cristóbal Colón, pasando por la Capilla Real, donde el Regimiento de Ingenieros hacía guardia. El resto de la comitiva estaba formada por canónigos de la Catedral y miembros de la Casa de Castilla León, del Cabildo de Alfonso X El Sabio, del Cabildo Catedral y del Cabildo Municipal, precedido por el cuarteto vocal instrumental Cantus Luminis.
Esta procesión, instaurada por Alfonso X en 1255, ha terminado con una misa y con la ceremonia de pleito-homenaje en la que se devolvieron de nuevo los símbolos a sus respectivos lugares, amenizada por la Coral de la Catedral.