La última borrasca ha dejado lluvias "muy eficientes" en opinión de Del Pino, sobre todo por la cantidad de agua que se ha podido recoger, especialmente con las grandes trombas del pasado viernes. Este episodio se deja notar en los pantanos que abastecen a Sevilla. Según datos de Emasesa están al 43% de capacidad de media. En el caso del pantano de Melonares está al 50% y el de Gergal, que es pequeño, al 90.
Sin duda un alivio que se traducirá en meses ganados a los cortes de suministro que las administraciones no descartan pero que, con episodios como el de Karlotta, se alejan en el tiempo. Se necesitan más lluvias para distanciarnos del problema de la sequía pero según el delegado de la Aemet, no parece que vayan a llegar en lo que queda de invierno.
De hecho, para la semana que viene podría llegar otra borrasca pero de escasa intensidad y que, según los mapas disponibles, no llegaría a tocar Sevilla aunque no se puede descartar. Al medio plazo, los expertos meteorólogos son pesimistas sobre la probabilidad de más precipitaciones intensas, que prácticamente descartan en lo que queda de mes de Febrero y en la primera mitad de Marzo.