Los regantes del Genil-Cabra reclaman una solución que garantice riegos con agua de calidad
Los agricultores piden que se agilicen los trámites para que se pueda iniciar la obra del embalse de Cordobilla
Miembros de la Junta de Gobierno de la comunidad de regantes genil-cabra , los alcaldes de los municipios de la campiña sur cordobesa, asociaciones agrarias y de regantes, así como cientos de agricultores, se han concentrado en el inicio del canal del Genil Cabra, en Cordobilla, para solicitar una solución urgente al problema de los lodos del embalse de Cordobilla y del canal de riego.
El embalse, se encuentra totalmente colmatado y el canal en el primer tramo está seriamente afectado pues ya sólo almacena unos 70 centímetros de agua, los siguientes tramos también están bastante afectados. Los agricultores piden soluciones que sean viables a largo plazo, de modo que las explotaciones de esta zona regable no vean comprometido su futuro.
Las principales peticiones formuladas a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir son las de agilizar los trámites para que se pueda iniciar la obra del embalse de Cordobilla, la realización urgente de una obra de emergencia con carácter inmediato en la captación del Embalse de Cordobilla que permita un bombeo regular y sin interrupciones esta campaña, iniciar los estudios necesarios para la elaboración de un proyecto de cambio de toma y así conseguir una mejor calidad y seguridad del agua bombeada, el inicio inmediato de las obras de limpieza del canal de riego, la redacción de un nuevo proyecto de limpieza de los tramos de canal que queden sin limpiar. Se estima que hay almacenado mayor volumen de lodos del contemplado en el proyecto. Los regantes reclaman a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir que se comprometa a soportar los gastos derivados de la extracción del lodo del Canal Principal de la Zona Regable del Genil Cabra mientras no se ejecute el proyecto de actuaciones en Cordobilla.
Los regantes concentrados, han solicitado además un adelanto de la dotación que se asigne para la campaña, con el fin de salvar los cultivos implantados ahora mismo en campo y que de no regarse, se perderán las cosechas por completo.