Sánchez y Feijóo cara a cara, con Díaz y Abascal expectantes en la distancia

El debate cara a cara en ATRESMEDIA entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo ha marcado la jornada en la campaña electoral. Con Yolanda Díaz lamentando la falta de contenido del debate y un Abascal que pese no haber estado presencialmente, sí lo ha estado en el discurso de ambos candidatos

El diario de campaña de hoy ha tenido un capítulo difícil para el PSOE: Pedro Sánchez se ha encontrado en Núñez Feijóo a un oponente duro de pelar, dispuesto a ganar el debate y a firmar un compromiso en directo con el actual presidente: que le deje gobernar si gana las elecciones a cambio de dejar gobernar a Sánchez si él las pierde.

Las fuentes más cercanas a la dirección del PSOE señalan que Sánchez ha sido capaz de descubrir los bulos del PP de los últimos días de campaña y que el candidato socialista es quien tiene el país en la cabeza, mientras que Núñez Feijóo tiene la cabeza en otro país.

Otras fuentes consultadas del partido tampoco ocultaban su descontento con el debate de Sánchez y señalaban que menos mal que no ha habido cuatro debates como quería el candidato socialista.

Y es que Sánchez, más incómodo en todo momento que Feijóo, nunca ha querido comprometerse a firmar en directo ese documento que le extendía sobre la mesa Núñez Feijóo para que gobierne la lista más votada, escudándose en que no ha ocurrido lo mismo en Extremadura -donde ganó el PSOE y el PP logró su gobierno gracias al apoyo de VOX.

Se cumple, en todo caso la máxima en los debates habidos hasta ahora en democracia:

Cuando el presidente candidato no gana el debate, es que el aspirante, al menos, seguro que no lo ha perdido.

Feijóo no ha acabado la jornada con el minuto de oro, tampoco con las declaraciones a la salida del plató. El candidato del PP, descargado del peso del debate se ha dirigido a la calle Génova para saludar a los afiliados que han seguido el cara a cara en la sede nacional del partido y que durante varios minutos le han jaleado con gritos de ¡presidente!, ¡presidente! y ¡oa, oa, Feijóo a La Moncloa!

"Gracias me lo he pasado muy bien [...] creo que hemos aclarado nuestra postura definitiva, somos un partido que merecemos gobernar solo si ganamos las elecciones", le ha dicho visiblemente satisfecho a sus compañeros .

Y ese había sido precisamente el argumento con el que Feijóo ha salido airoso del bloque de pactos y gobernabilidad en el que se presuponía iba a ser arrinconado por Sánchez. Si el aspirante a la reelección le pintaba un futuro con Abascal de vicepresidente, él le extendía un documento para que se comprometieran ambos a ceder el poder al partido más votado. De la defensa al ataque en unos segundos y Sánchez neutralizado.

Para entonces el líder del PP le había cogido la distancia a su contrincante por abuso táctico en partes donde aún no tocaba.

Pero desde el principio se vio que Sánchez no quería esperar. No respetó la fase de tanteo y a las primeras de cambio ya puso a Vox y Abascal sobre la mesa. Tres veces metió PP y Vox en el mismo saco y lo hizo cuando tocaba hablar de Economía. Cuando se dio cuenta se le habían pasado los minutos escuchando datos y hasta una gráfica que según Feijóo refleja el verdadero estado de nuestra economía, endeudada e inflacionada. Tan claro lo vio candidato popular que llegó a preguntarle si estaba nervioso por la sucesión de interrupciones.

Apenas iniciado el bloque de Igualdad, fuentes del PP difundían un primer juicio:

"Las continuas interrupciones del candidato del PSOE no han servido para tapar una realidad: los ciudadanos no perciben esa economía perfecta que defiende Sánchez porque los españoles sufren para pagar las hipotecas, los alquileres o la cesta de la compra. Y nuestro país sigue sin recuperar los datos de PIB previo a la pandemia".

El PP barruntaba que Sánchez, una vez enredado en la bronca, no se recuperaría del primer asalto. Una hora después hacían el balance adelantado de la noche sin ni siquiera esperar al minuto de oro: "Sánchez tiene suerte de que haya sido un cara a cara y no seis como pedía", aseguraban fuentes de Génova. "Feijóo nunca ha gobernado con Vox pero Sánchez tendría que tomarse si repitiera como presidente del Gobierno. El poder que Bildu en la política del Gobierno acaba con la salida de Sánchez del Palacio de la Moncloa", sentenciaban.

Y así se presentará Feijóo este martes en Ciudad Real y Cádiz, mecido por la euforia que ha entrado en Génova por un resultado quizás inesperado.

En SUMAR no se han engañado. Sabían que el asunto del día iba a ser el cara a cara que Sánchez y Feijoó celebraban en este grupo. Así que hicieron lo único que podían hacer: seguir su campaña como si tal cosa, insistir en que ellos hacían sus propuestas y atacar el debate en el que no participaban.

Al margen de lo del “debate de dos hombres que miran al pasado y del bipartidismo” que venía ya diciendo, Yolanda Díaz añadió un apunte más: es el debate al que Feijoó dice sí porque no le tiene miedo… y retó al presidente del PP a debatir con ella.

Lo hizo desde Baleares, donde su marca se presenta bajo el nombre Sumar Més. Acaban de perder el Gobierno en el que participaban, Gobierno de PSOE, Més y Unidas Podemos… Y no obstante Yolanda se presentó como “la novedad para estas elecciones”.

Santiago Abascal considera muy grave que en el Cara a Cara de Atresmedia Alberto Núñez Feijóo le haya ofrecido a Pedro Sánchez un pacto para que pueda gobernar, aunque la suma del PP y Vox pueda desalojarlo de la Moncloa. El presidente de Vox y candidato a la presidencia del Gobierno ha publicado esta noche un contundente tuit: “Creo que los españoles ya hemos visto suficiente en este debate. Es preocupante. Hace 5 años que La Moncloa está ocupada por un personaje narcisista, agresivo y perturbado. Y a ese personaje peligroso el señor Feijóo acaba de ofrecerle una abstención para que pueda seguir gobernando. El señor Feijóo ofrece un pacto a Sánchez para evitar un pacto con VOX”, asegura Abascal en Twitter.

Ha estado ausente el líder de Vox en el Cara a Cara de Atresmedia, pero a la vez muy presente en boca de Pedro Sánchez y de Alberto Núñez Feijóo. Santiago Abascal respeta la fórmula del debate, pero no la comparte por no ser representativa -a su juicio- de la sociedad española. Nuevo toque de atención del candidato de Vox a los medios de comunicación, a los que ha pedido (en una entrevista en Espejo Público de Antena3) acabar con el bipartidismo retrógrado en los debates electorales.

Este lunes, Santiago Abascal ha seguido con su agenda electoral y ha aprovechado para presentar en Madrid su programa cultural, que pasa por “proteger las tradiciones populares, los eventos religiosos y los festejos taurinos de los ataques del progresismo, y potenciar el español en el extranjero”. El programa cultural de Vox apuesta además por impulsar la defensa y la conservación de la raza autóctona del toro de lidia, porque “su destrucción causaría un daño irreparable a la Dehesa”.