Junts, Esquerra y Bildu no se reunirán con el rey Felipe VI
La ronda de consultas posterior a la composición del Congreso arrancará el próximo lunes, aunque los partidos independentistas, que rechazan la forma del Estado, no se reunirán con el monarca.
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Una vez conformada la Mesa del Congreso, en la que se ha conformado una mayoría progresista, el Rey Felipe VI se dispone la ronda de consultas que, como marca la Constitución, precede a la designación de un candidato a la Presidencia del Gobierno: sin embargo, no todas las fuerzas políticas que han logrado representación se reunirán con el monarca, pues Junts, Bildu y Esquerra, como han informado a Europa Press, no tienen intención de acudir a la cita.
El objetivo de esta ronda de consultas - reflejada en el artículo 99 de la Constitución Española - es que cada uno de los representantes de los partidos informe al Rey acerca de las alianzas y acuerdos que se hayan cerrado, de cara a una futura investidura. Una vez informado y siendo consciente de la aritmética parlamentaria, el Rey tiene la potestad de proponer un candidato a la Presidencia del Gobierno, que se someterá a una investidura en el Congreso.
Sin embargo, Junts y Esquerra no se reunirán con el monarca, pues mantienen un boicot frente al rey después del discurso emitido por Felipe VI en reacción a la celebración del referéndum ilegal que tuvo lugar en 2017, como informa Europa Press. Sin embargo en 2019, Laura Borrás, de Junts, sí que se reunió con Felipe VI, aunque Bildu y los republicanos declinaron la oferta.
Esta ronda de encuentros se realizará a lo largo de la semana que viene y, como marca la tradición, se realizarán en orden inverso a la representación obtenida en el parlamento: la primera reunión arrancará el próximo lunes, cuando el rey se reunirá con Javier Esparza, de UPN. Estas consultas finalizarán el martes tras la último reunión, entre Felipe VI y Nuñez Feijóo, líder del Partido Popular.
Dudas sobre la investidura
Tanto Feijóo, ganador de las elecciones con 137 diputados, como Pedro Sánchez, que consiguió 121, quieren presentarse como candidatos para la investidura; es la primera vez que dos candidatos expresan su intención de presentarse, pues, hasta ahora, siempre se ha presentado en primer lugar aquel candidato que ha obtenido un mejor resultado en los comicios. Sin embargo, la suma de fuerzas parece inclinar la balanza hacia el lado socialista: el PP tiene asegurado el voto de 171 diputados (PP, Vox y UPN), mientras que, de repetirse la alianza que ha hecho presidenta a Armengol, el candidato del PSOE se impondría con 178 votos a favor (PSOE, Sumar, ERC, Junts, PNV, Bildu y BNG).
Sin embargo, tal y como han puntualizado Junts y Esquerra, las negociaciones para facilitar estas investiduras todavía tienen que llevarse a cabo. Este mismo argumento ha empleado el PP para apoyar la investidura de Feijóo, a quien reivindican como ganador de las elecciones. El PSOE, por otro lado, califica como "fracasado" el tándem entre PP y Vox, y tacha de "cábala mágicas" los cálculos del PP.
Una consulta reflejada en la Constitución
El artículo 99 de la Constitución refleja esta ronda de consultas explicando que "después de cada renovación del Congreso de los Diputados, el Rey, previa consulta con los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria, y a través del presidente del Congreso, propondrá un candidato a la Presidencia del Gobierno".
La Constitución también establece que accede a la presidencia el candidato que cuenta con la confianza del Congreso, y no necesariamente quien haya ganado las elecciones (aunque, hasta ahora, siempre ha sido presidente del Gobierno el candidato de la lista más votada).
En 2016 se dio otra situación inusual en el proceso de consultas, pues Felipe VI encomendó la tarea de conformar Gobierno al candidato Mariano Rajoy. El líder popular, sin embargo, rechazó el ofrecimiento por falta de apoyos en el parlamento y, más tarde, el monarca nominó a Sánchez para someterse a una investidura, que fue fallida.