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El voto rural en Extremadura puede decidir la tendencia de toda la región. Y es que los municipios campestres concentran dos de cada tres electores. Es el caso del pueblo de Don Benito, en Badajoz, que cuenta con 37.000 habitantes y desde 2011 se ha ganado el título de termómetro electoral de toda la comunidad por adelantar el comportamiento del conjunto electoral extremeño. Es decir, lo que pasa en Don Benito suele anticipar lo que pasa en Extremadura.
La respuesta de sus resultados se debe al conjunto de población joven y mayor y, también, a la mezcla de lo urbano y rural. De sus locales, el 90% viven en núcleo urbano y el 10% en pedanías y, de estas personas, casi el 20% depende del mundo rural.
Por ejemplo, en las elecciones autonómicas de 2023, en Extremadura, los datos que se vieron fueron: PSOE 38,9%, PP 38,3%, Vox 8,6%, Podemos 6%. Y, en lo que respecta a Don Benito, los datos fueron: PSOE 39,9%, PP 38,9%, Vox 8,1%, Podemos 6%. Esto dejó una oscilación mínima entre lo que respecta a toda la región y al propio pueblo.
En Estados Unidos, Ohio anticipa también quién ganará las presidenciales. En el caso de Extremadura, como se ha comentado, ese papel lo tiene Don Benito, ya que es su población la que refleja la mayoría de intereses de la Comunidad Autónoma.
En unas elecciones donde el voto rural es clave, Don Benito se ha convertido en un reflejo de la región que reúne las transformaciones de unas votaciones que definen el rumbo político de la región.