Así es Saúl Craviotto: su lado más personal, su mujer y su trayectoria
Saúl Craviotto está a unas horas de cumplir uno de los sueños de cualquier deportista: el de representar a su país como abanderado en unos Juegos Olímpicos.
Madrid | 23.07.2021 07:04
El piragüista español, de 36 años, se enfrenta al que será su cuarto campeonato olímpico –ha participado en todas las ediciones desde 2008–, en busca de una nueva medalla, que se unirá a los dos oros, la plata y el bronce que ya ganó en Pekín, Londres y Río de Janeiro.
Esta edición será la más especial pues, junto a Mireia Belmonte, el deportista será el encargado de liderar a España en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Tokiocomo abanderado de nuestro país. El deportista no ha dudado en definir este nuevo reto que afronta como "la cima del deporte".
Sin embargo, al margen de su trayectoria deportiva, Saúl Craviotto también ha demostrado que sabe compaginar el deporte con su vida familiar, su pareja, sus aficiones y su profesión. Descubrimos un poco más sobre el abanderado español en Tokio y sobre su lado más personal.
Un hombre de familia
Nacido en Lleida en 1984, el piragüista tuvo que abandonar pronto la que era su casa, a los 15 años, para trasladarse a Madrid, con el fin de ingresar en el Centro de Alto Rendimiento del Consejo Superior de Deportes y seguir consolidando su carrera deportiva.
A pesar de haberse convertido en una leyenda del piragüismo español, Craviotto no olvida a aquellos que estuvieron siempre a su lado. El nuevo abanderado español es una persona muy unida a su familia, tal y como lo demuestra en sus redes sociales, donde siempre que puede comparte imágenes con su mujer, sus dos hijas y sus padres.
El remo, una afición heredada
La pasión de Saúl Craviotto por el remo fue algo que sin duda heredó de su padre, Manuel Craviotto, que fue piragüista de la selección. Desde bien pequeño le aficionó a navegar en piragua por los Pirineos de Lleida y, aunque nunca se imaginó que llegaría a ocurrir, le animó a entrenar hasta convertirse en uno de los mejores del mundo en esta disciplina.
"Recuerdo que cuando era un niño mi padre me ataba una cuerda de su piragua a la mía, y nos íbamos a navegar por sitios perdidos. Y yo, con lo vago que era, levantaba la pala y me llevaba de paseo", explicaba en una entrevista a la revista Hola.
Casado con una influencer
Saúl Craviotto comparte su vida con la que desde 2013 es su mujer, Celia García, con la que ha tenido dos hijas: Valentina, de seis años, y Alejandra, de tres. Se prometieron en Londres el día después de que el piragüista consiguiera su medalla en K1 200 m.
Esta nutricionista ha encontrado en las redes sociales un espacio para divulgar acerca de la comida sana. En su cuenta @thefitbowl, la pareja del piragüista comparte recetas saludables y sencillas para sus más de 100.000 seguidores, que la convierten ya en una de las influencers de referencia en el mundo ‘realfood’. Además, es autora del libro ‘Comida Sana en Bowl’ en el que ha compartido 100 recetas de comida saludable.
Celia, como técnico en nutrición y dietética, también ha sido la encargada de adaptar la dieta de su marido para mejorar el rendimiento deportivo de cara a los JJOO de Tokio.
Pasión por la cocina
El bicampeón olímpico ha demostrado que el deporte no es la única disciplina en la que es sobresaliente. De hecho, Craviotto no oculta su pasión por la cocina, afición que comparte también con su mujer Celia y que descubrió durante su participación en la segunda edición de MasterChef Celebrity.
Gracias a sus grandes dotes de cocinero, el piragüista ganó en 2017 la segunda edición del reality de cocina, donde destacó por encima de todos los concursantes por sus grandes dotes culinarias, siendo el favorito del público desde el inicio del programa.
Ahora, comparte habitualmente recetas sanas y nutritivas en sus redes sociales, ayudando a su mujer en muchas ocasiones, y colabora en algunos programas del mundo gastronómico.
De profesión, policía
A pesar de su destreza como piragüista, Saúl Craviotto no se dedica exclusivamente al deporte como profesión. Con 19 años, decidió labrarse un futuro dentro de la policía nacional, pues sabía que del piragüismo no iba poder vivir. Hasta 2017, el cuatro veces medallista olímpico mantuvo su puesto de trabajo como policía nacional en Gijón, cuando apenas era un desconocido para la ciudadanía española, a pesar de sus notables éxitos deportivos.
Sin embargo, su paso y posterior victoria en las cocinas de MasterChef le obligaron a abandonar su labor habitual de patrulla. El deportista decía que mucha gente había dejado de tomarle en serio tras reconocerle, debido a su creciente popularidad y eso complicaba su trabajo como policía.
Ahora, Saúl ocupa un puesto en el departamento de Participación Ciudadana, donde se dedica a trabajar en campañas de prevención y concienciación ciudadana e imparte conferencias a niños y adolescentes en escuelas sobre las drogas, el alcohol y el acoso.
Aún así, durante el confinamiento y el aplazamiento de los Juegos Olímpicos, el catalán no dudó en posponer su preparación física para volver a ponerse el uniforme de la Policía Nacional y ayudar a sus compañeros en sus arduas tareas en un difícil momento. "Volví a mi trabajo ante la necesidad de la situación que vivimos", aseguraba Craviotto.
Trayectoria deportiva
Craviotto comenzó a destacar en la disciplina de remo desde bien joven. A los 15 años ganó la que fue su primera medalla internacional en Brasil, en los Campeonatos del Mundo en Categoría Junior, algo que le llevó a continuar su carrera en el Centro de Alto Rendimiento en Madrid.
Durante sus más de 20 años de carrera, Craviotto ha conseguido cuatro medallas en sus tres participaciones olímpicas: dos oros en K2 200 (Río) y K2 500 (Pekín), una plata en K1 200 (Londres) y un bronce en K1 200 (Río).
Además, el piragüista español también cuenta con otras 17 medallas en Campeonatos de Europa y del Mundo y obtuvo en 2017 el Premio Nacional del Deporte.
Una nueva leyenda del deporte español
Saúl Craviotto se ha convertido en uno de los culpables del crecimiento del piragüismo como deporte en España, al que cada año se suman más jóvenes y más clubes, y su laureada trayectoria es la prueba de ello.
La cita en Tokio podría suponer la consagración de un nuevo récord para el deporte español. Así, Saúl Craviotto, que competirá en las categorías de K1 200 y K4 500, luchará por conseguir el récord absoluto de medallas de un deportista español, título que aún ostenta el piragüista David Cal, que consiguió 5 metales. Además, podría convertirse en el único español con tres medallas de oro, superando el que ya comparte con Juan Llaneras y Gervasio Defer.
Lo cierto es que el conjunto español llega como favorito a la prueba del K4 500, después de haberse hecho con el oro en el Campeonato del Mundo de Szeged (Hungría) en 2021, tras derrotar a los alemanes.
Por su parte, Craviotto también competirá en la prueba de K1 200, donde fue bronce en 2016, aunque tendrá más difícil revalidar su triunfo después de haber quedado sexto en el Mundial de mayo.
Sin embargo, pase lo que pase en Tokio, Saúl Craviotto es ya una leyenda del deporte español