Adriana Cerezo gana la medalla de plata en Taekwondo en los Juegos Olímpicos de Tokio
Por terceros Juegos consecutivos, el taekwondo español se cuelga al menos una medalla olímpica. Adriana Cerezo gana la medalla de plata frente a la tailandesa Panipak Wongpattanakit, vigente campeona mundial y número uno del ranking planetario.
La taekwondista española de 17 años Adriana Cerezo Iglesias se alzó este sábado con la medalla de plata en la categoría de hasta 49 kilos de su disciplina en los Juegos Olímpicos de Tokio, el primer metal para el equipo de España.
Cerezo salió a la pista sonriendo, celebrando antes de comenzar una final que se tomó con más cautela y cabeza fría que los combates anteriores y en el que terminó derrotada por un ajustado 11-10 cuando restaban siete segundos por una patada certera de la tailandesa Panipak Wongpattanakit, número uno del mundo y bronce en Río 2016.
La considerada promesa española de este deporte, convertida ya en referente, reconoció la victoria de su rival entre lágrimas de frustración, pues su meta en Tokio era el oro. La madrileña rozó lo más alto del podio a pesar de combatir sin el arrojo del público en las instalaciones deportivas prácticamente vacías preparadas expresamente en el centro de convenciones Makuhari Messe de Chiba, al este de la capital. Cerezo aseguró la primera medalla para España tras vencer por 39 a 19 en semifinales a la turca Rukiye Yildirim, cuarta del mundo, en un enérgico combate en el que abrió el marcador con una patada en la cabeza y en el que presionó con golpes y patadas al cuerpo sin dejar que las penalizaciones mutuas la distrajeran.
Con tan sólo 17 años, la benjamina de la expedición española en Tokio se ha convertido en la cuarta medallista olímpica española más joven en una categoría individual, tras las gimnastas Carolina Pascual y Patricia Moreno, y el boxeador Faustino Reyes.
Así desfilaron Saúl Craviotto, Mireia Belmonte y la delegación española en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Tokio
Una de las más deslucidas ceremonias de inauguración ha tenido lugar en el estadio olímpico de Japón. Ya están en marcha los JJOO de Tokio 2020 en 2021. Eso explica mucho.
Ha sido raro. Una fiesta convertida en algo medio clandestino. Pero era lo que tocaba. Las mascarillas y la distancia de seguridad han sido las protagonistas de un desfile de casi 10.000 deportistas que han visto un millar de privilegiados desde la grada.
España, una de las delegaciones más animadas
España ha desfilado en el lugar 88. El criterio empleado ha sido la pronunciación en el idioma japonés, con alguna excepción ya que Grecia fue la primera en desfilar por ser los creadores del espíritu olímpico. Tras ellos el equipo de refugiados y en las tres últimas posiciones, Francia por París 2024, EEUU por Los Ángeles 2028 y Japón como anfitriona.
Los abanderados españoles no podían ocultar su sonrisa pese a la mascarilla. Especialmente Mireia Belmonte que saludaba al público presente junto a un Saúl Craviotto que declaró que ese momento iba a ser la cima de su carrera. La gran novedad era tener dos abanderados. No todos los países lo cumplieron ya que Etiopía, Emiratos, Libia u Omán han desfilado solo con un hombre como abanderado. Sin embargo, otros países como Catar, Siria, Arabia Saudí o Sudán sí han compartido bandera con un hombre y una mujer.