Los 'Red Sticks' aprovecharon su dulce momento para hacer soñar a la delegación española con una medalla. Su tercer triunfo y las sensaciones que están dejando en el Centro de Hockey de Deodoro apuntan a reverdecer laureles en el hockey sobre hierba.
Este martes, los pupilos de Frédéric Soyez tuvieron que sudar de lo lindo para llevarse los tres puntos. Pese a su buen comienzo, con un tempranero de Roc Oliva tras una salida en 'penalti-córner', España reculó en los minutos siguientes y acabó pagando su efímero conservadurismo.
Simon Child, fiel a su golpeo, no falló en el lanzamiento y batió a un sensacional Quico Cortés, nuevamente uno de los grandes baluartes de la selección nacional. A los pocos minutos, y tras una nueva reacción, una gran jugada de Alvaro Iglesias habilitó a Alex Casasayas para poner el 1-2.
El barcelonés del Polo, autor del gol ante los australianos, no falló sobre la misma línea y dio ventaja a la selección. Nueva Zelanda, por su parte, continuó tímida en ataque, aunque ganó enteros en labores defensivas.
Su consistencia en los metros finales le acabó dando resultado gracias a un nuevo 'penalti-córner' de Simon Child. En todos los Juegos, los 'kiwis' sólo habían marcado un 'pc' de 11 lanzamientos y este martes batieron a España en su primer intento.
El 2-2 congeló las intenciones de unos y otros hasta los dos minutos finales. Los neozelandeses desperdiciaron un penalti-córner al toparse con un excelso Cortés y, en la jugada siguiente, sufieron el mazazo de Lleonart, que llevó al éxtasis a la selección española. El triunfo coloca a los 'Red Sticks' en primera posición del grupo A a la espera del resultado que coseche Bélgica este martes.