El equipo dirigido por el francés Frédéric Soyez tuvo una actuación sensacional y demostró su capacidad de sufrimiento para vencer al número uno del ránking mundial.
Los 'Kokaburras', pese a la derrota con España, siguen siendo los grandes favoritos para pelear por la medalla de oro.
El partido tuvo dos fases, diferenciadas con el descanso, sobre todo tras la actitud de España, que se dedicó a defender con uñas y dientes el gol tempranero de Casasayas, que acertó con la portería contraria en el tramo inicial del encuentro. El gol aplacó los ánimos de los 'aussies', que se toparon una y otra vez con el portero Quico Cortés.
El portero del Egara fue el más destacado de una selección que sufrió el buen hacer de los australianos en los metros finales. Una mejoría que, sin embargo, no pudieron refrendar en el electrónico pese a los tres 'penalti-córners' que tuvieron a su disposición.
España, sin fallos en defensa, incluso tuvo ocasiones para ampliar la renta en el stick de Miki Delas y en un remate de Casasayas que no conectó a acertar un excelente servicio de Iglesias. Pero dio igual. De ninguna de las maneras logró Australia batir la meta nacional.
Pese a la tarjeta verde a Piera y el 10 vs 9 de los dos últimos minutos, España aguantó a la perfección y consiguió tumbar a la número uno del ránking mundial.
De los últimos cinco enfrentamientos, los 'Red Sticks' habían perdido siempre con los 'aussies'. Su última victoria fue en Pekín 2008, cuando España fue precisamente plata.