El pasado viernes Luis Rubiales decidió mantenerse en el cargo de presidente de la Real Federación Española de Fútbol a pesar de la polémica generada por el beso a Jenni Hermoso en la celebración del Mundial que ganó España en Sídney.
En la comparecencia de la Asamblea extraordinaria de la RFEF, Rubiales explicó que el beso fue "espontáneo, mutuo y eufórico. Y, sobre todo, consentido". El hasta ese momento presidente de la RFEF explicó su versión del beso contando que "en el momento en el que apareció Jenni ella me levantó del suelo y al dejarme nos abrazamos y yo le dije olvídate del penalti, has estado fantástica en este Mundial y ella me dijo eres un crack, yo le dije ¿un piquito? y sucedió".
En la tarde de ese mismo día, la futbolista sacó un comunicado conjunto con el resto de sus compañeras de selección en el que decía sentirse "vulnerable y víctima de una agresión". Además, dejó claro que el beso que le propinó Luis Rubiales "no fue consentido".
En la noche de ese mismo viernes, la RFEF lanzó un comunicado, contestando a Jenni Hermoso y a las jugadoras, en el que decía que "el presidente de la RFEF no mentía" y para ello publicaron cuatro imágenes del abrazo entre Rubiales y Jenni Hermoso.
Ahora, después del cruce de comunicados, ha salido a la luz un vídeo en el que se ve claramente cómo Jenni Hermoso no levanta a Luis Rubiales, sino que es él quien se balancea sobre ella con las piernas en alto. Este vídeo está grabado desde las gradas del estadio donde España se proclamó campeona del Mundo de Fútbol.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha abierto diligencias preprocesales para investigar el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso y preguntará a la futbolista si queire denunciar por los hechos acontecidos.
El Ministerio Fiscal ha tenido en cuenta el comunicado de la jugadora de la Selección española en el que manifestó que el beso "no fue consentido" y esto podría ser constitutivo de un delito de agresión sexual, previsto y penado en el artículo 178 del Código Penal. .