Rubiales posee grabaciones clandestinas de sus conversaciones con altos cargos del Gobierno

Según El Confidencial, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, posee grabaciones privadas con varios miembros del Gobierno desde que asumiera la presidencia en mayo de 2018. No se trata solo de conversaciones telefónicas, también habría grabaciones de reuniones presenciales con ministros y altos miembros. Entre los temas tratados en estas conversaciones se encuentran su conflicto para conseguir la reelección, el de los horarios de LaLiga, el relacionado con el presidente de la AFE, David Aganzo, y la celebración de la Supercopa de España en Arabia Saudí.

Según la información de El Confidencial, el presidente de la RFEF, grabaría las conversaciones utilizando la cámara de otro teléfono para que se viera el nombre de la persona con la que está hablando en la pantalla. Para grabar las reuniones presenciales emplea un bolígrafo con un sistema de grabación.

Entre las conversaciones grabadas destaca una con la entonces presidenta del CSD y secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano, unos minutos después de que el TAD tumbara las elecciones de la Federación en las que Rubiales saldría reelegido. Según este medio, se escucha a Rubiales decir que "está claro que aquí o das miedo o das asco, lo de hoy es un antes y un después. UEFA y FIFA no se van a quedar quietas".

La votación resultó ser de cinco votos a dos en contra de los intereses de un Rubiales que creía que estaban "todos vendidos. Es mi opinión. Para mí no hay otra explicación. Y que este país es un puto desastre es la segunda explicación. Pero que va a haber consecuencias desgraciadamente... ya está. Se han acabado los buenos actos, Irene", se le escucha decir a Rubiales.

Investigó a Aganzo con una agencia de detectives

Otra de las informaciones que ha publicado El Confidencial en las últimas horas tiene que ver con la contratación por parte del presidente de la RFEF de una agencia de detectives privados para investigar a David Aganzo, presidente de la AFE, en agosto de 2019.

Rubiales trataba entonces de destituir a Aganzo como presidente del sindicato planteando una moción de censura con gente de su confianza. Según esta información, un detective le siguió durante cuatro días.

"Hemos adulterado la competición"

El pasado lunes se publicó que tanto el presidente como algunos de sus colaboradores habían reconocido una adulteración de la competición en el verano de 2020, cuando no permitieron al Deportivo de la Coruña disputar su partido decisivo ante el Fuenlabrada para salvar la categoría al mismo tiempo que el resto de sus rivales por la permanencia.

Según El Confidencial, Rubiales reconoció al secretario general de la RFEF, Andreu Camps, a través de mensajes de WhatsApp que "tenemos un marrón. Hemos adulterado la competición. Hay que asumirlo".