El Real Madrid cerró su gira por China con un triunfo en la tanda de penaltis después de un choque lento y en el que la defensa milanista dejó a cero al Real Madrid, donde destacó Casilla con dos buenas paradas.
El conjunto entrenado por Rafa Benítez, que mostró un ritmo lento en su juego, no consiguió perforar durante el tiempo reglamentario la portería del Milan, que tuvo, en las botas del colombiano Carlos Bacca, la oportunidad de llevarse la victoria en la segunda parte.
Desde el primer minuto de juego se impusieron el bajo ritmo y la escasez de oportunidades por parte de ambos conjuntos, incluso el Milan dispuso de acercamientos más peligrosos que el equipo madridista, con el francés M'Baye Niang poniendo a prueba a la zaga blanca.
El Real Madrid, que arrancó el choque con el galés Gareth Bale de enganche y las novedades de Álvaro Arbeloa en el lateral izquierdo y Lucas Vázquez en la banda derecha, no inquietó durante los primeros cuarenta y cinco minutos a Diego López, guardameta gallego del Milan y exjugador del Real Madrid.
Las incorporaciones de jugadores como Jesé, Kroos o Isco tras el descanso reactivaron las ideas del equipo madridista que comenzó a llegar con mayor asiduidad al arco del equipo lombardo, que a través de un ordenado entramado defensivo secó el ataque blanco.
El portero Kiko Casilla, prácticamente inédito en su estreno con el Real Madrid el pasado lunes ante el Inter de Milán, pasó a ser protagonista en la segunda mitad con dos decisivas intervenciones a disparos del delantero colombiano y exjugador del Sevilla, Carlos Bacca.
Con el empate a cero en el marcador tras el pitido final, ambos equipos se marcharon al punto de penalti para resolver la "International Champions Cup" en su versión china, torneo en el que se impuso el Real Madrid con el fallo final, tras veinte lanzamientos, del guardameta italiano de 16 años, Gianluigi Donnarumma.