La Real Federación Española de Fútbol ha abierto la puerta de salida a Jorge Vilda, pero él se niega a salir. El técnico de la selección femenina aceptaría dejar de ser el técnico de la absoluta de fútbol femenino, pero quiere quedarse en la Federación de Fútbol.
Las situación de Vilda ha provocado división entre los presidentes de las federaciones territoriales que siguen debatiendo sobre su cese.
El futuro del técnico español está en el aire desde la pasada semana cuando se celebró la Asamblea extraordinaria de la RFEF, a pesar de que Rubiales le ofreción en ese momento un contrato de cuatro años con un salario de 500.000 euros por año.
Jorge Vilda ya supuso un motivo de polémica en la Selección Española de Fútbol Femenino el pasado verano. 15 de las jugadoras de la selección absoluta mostraron su descontento a la RFEF y al propio Vilda, seleccionador y director deportivo de las selecciones femeninas.