Con Sergio Mantecón como técnico interino, el equipo ilicitano, el único que aún no ha logrado ganar en la competición, mantuvo el equilibrio de fuerzas durante el primer periodo, en el que logró adelantarse en el marcador por medio de Lirola y rozar un segundo gol tras un cabezazo de Milla, pero en la segunda parte fue superado ampliamente por el Girona, que hizo méritos y ocasiones para lograr un marcador más amplio.
El Elche poco a poco fue perdiendo empuje y cediendo terreno, lo que aprovechó el Girona para igualar con un tanto de Iván Martín tras dejada de Javi Hernández. El empate enfrió al Elche y animó al Girona, que pasó a controlar por completo la posesión del balón, aunque sin pegada.
Mantecón intentó hacer reaccionar a su equipo, cada vez más hundido en su área, con la entrada de Gumbau y Ponce, pero el balón y la iniciativa siguieron siendo del Girona, que acabó por encontrar el premio del gol tras un pase de Arnau pasaportado a la red por Taty Castellano.
Con el Elche descompuesto y desordenado, el Girona pudo jugar a placer y solo la falta de puntería evitó una derrota más contundente ante la impotencia de la afición local, que volvió a abroncar el juego de equipo.