Italia conquista su segunda Eurocopa en la tanda de penaltis
Italia ha ganado la Eurocopa ante Inglaterra tras imponerse en la tanda de penaltis (1-1) (3-2).
Italia ha ganado su segunda Eurocopa tras derrotar a Inglaterra en los penaltis (1-1 al final del partido) con los fallos de Saka, Jadon Sancho y Marcus Rashford desde los once metros.
Inglaterra llegó al descanso ganando 0-1 a Italia en la final de la Eurocopa con un tanto de Luke Shaw (el gol más rápido en una final de la Eurocopa) que colocó al combinado de Gareth Southgate por delante en el marcador después de los primeros 45 minutos del choque en Wembley.
El gol más rápido de una final de la Eurocopa
Shaw marcó el gol de Inglaterra a los dos minutos después de aprovechar una asistencia desde la banda derecha de Kieran Trippier que remató a la red de la portería defendida por Gianluigi Dunnarumma.
Italia sólo tuvo una ocasión en las botas de Federico Chiesa, que a los 35 minutos mandó fuera un disparo desde fuera del área que se marchó cerca de un poste de la meta de Jordan Pickford. El gol de Shaw, y el intento de Chiesa, fueron las dos únicas ocasiones claras de un partido que Inglaterra tenía controlado.
Sin embargo, la segunda parte comenzó con un cambio de tónica: Inglaterra se encerró en su campo, dio un paso atrás, mientras que Italia fue creciendo en busca del empate. En el minuto 61, casi la tuvo Italia. Pickford evitó la igualada de los italianos con un paradón a disparo de Chiesa dentro del área.
Bonucci empata el partido
El gol del empate llegó en el minuto 67. Italia empató la final con un gol de Bonucci que tras una jugada embarullada, puso las tablas en el marcador. Remató primero Verratti, Pickford le sacó el remate y el central terminó anotando.
La anécdota del partido la protagonizó un espontáneo cuando, cerca del final, saltó al campo y el encuentro tuvo que detenerse durante varios minutos bajo la atónita mirada de los jugadores.
Prórroga en Wembley
El partido terminó en empate al final de los 90 minutos y llegó la prórroga, la tercera para Italia y la segunda para los ingleses. Con varias ocasiones de gol pero sin acierto, el encuentro llegó al minuto 123 sin goles. La victoria se decidiría en los penaltis.
Tanda de penaltis
Y los penaltis dictaron sentencia: la Azzurra se proclamó campeona. Chiellini volvió a ganar el sorteo e Italia lanzó primero como contra España.
Se lanzó en el lado de la afición inglesa, pero empezó anotando Berardi. Replicó Kane y erró Belotti. No falló Maguire. 2-1 para Inglaterra y toda la presión del mundo para Italia. Bonucci asumió el mando y no decepcionó, a diferencia de un Marcus Rashford que salió exlusivamente para los penaltis y tiró el suyo al palo. 2-2.
Vuelta a empezar. Bernasdeschi lo dejó todo listo para la gloria italiana, cuando Sancho se encontró con la primera gran estirada de Donnaruma. Pero Jorginho le dio emoción, Pickford le sacó el penalti de la victoria. Una alegría efímera, porque Donnaruma, impertérrito, frenó a Saka y mandó la copa a Roma. La primera para Italia desde 1968, una puñalada al corazón inglés, que tendrá que seguir ansiando algo que rememore la gloria de 1966.