Uno de los partidos más esperados esconde numerosos atractivos más allá del morbo de ver a Mbappé ante los que todo apunta que serán sus compañeros en menos de cuatro meses. El regreso de Leo Messi al que fue su jardín, la vuelta a casa de una leyenda blanca como Sergio Ramos, los regresos también de Keylor Navas, Achraf o Ángel Di María, la aparición de Neymar…
El equipo de Carlo Ancelottipierde a dos jugadores clave como Mendy y Casemiro. El italiano apostará por Kroos (si está recuperado) o Camavinga para sustituir al brasileño. El lateral zurdo será cosa de Alaba, con Nacho ocupando su plaza de central junto a Militao.
Ese costado izquierdo presentará la noche esperada por el brasileño Vinicius: quiere vivir la primera gran remontada en el Santiago Bernabéu y reivindicar su figura ante las estrellas del rival. Compartirá ataque y búsqueda de goles con Karim Benzema y Rodrygo o Asensio.
El atacante francés llega justo a un Bernabéu que puede ser su casa en unos meses. La afición se debate entre el miedo al daño que les puede hacer y la admiración al jugador. El otro foco de peligro puede venir de un Neymar que parece haber dejado atrás sus problemas físicos y un Messi especialista en asaltar la casa blanca en sus años en el Barcelona.
El ambiente será el de una noche mágica, condicionada por el aforo menor de un Santiago Bernabéu en obras, pero que alcanzará los 62.000 espectadores en busca de una remontada que lleve a los blancos a los cuartos de final de la Champions.