El español Alejandro Valverde (Movistar) impuso su velocidad para ganar la cuarta etapa de la Vuelta a España disputada entre Estepona y Vejer de la Frontera con 213 kilómetros de recorrido, en la que el colombiano Esteban Chaves (Orica) logró mantener el maillot rojo de líder.
Valverde, tercero en el Tour, tiró de clase en una llegada que le venía como anillo al dedo y tras alcanzar al irlandés Nicolas Roche a 100 metros de meta alzó los brazos como ganador en la localidad de Vejer, donde otro español, Dani Moreno (Katusha) entró tercero.
En la general se mantuvo al frente el colombiano Chaves, quien entró en décimo lugar de la etapa a 3 segundos de Valverde, junto a los favoritos, entre ellos Quintana y Froome, mientras que "Purito" Rodríguez marcó el mismo tiempo que el ganador.
El murciano se llevó además 10 segundos de bonificación y se pone cuarto en la general. El holandés Tom Dumoullin (Giant) y el irlandés Roche siguen en la segunda y tercera plaza.
A pesar del calor y de tratarse de la jornada más larga de la presente edición, la fuga se formó de salida con seis valientes: Irízar (Trek), Delagé (Francaise), Maes (Etixx), Durasek (Lampre), Engoulvent (Europcar) Lindeman (Lotto Jumbo).
El pelotón no se inmuto y dejó que la diferencia alcanzara los 14 minutos en el kilómetro 22, momento en el que el Orica asumió su papel de defensor del liderato de Chaves.
Se iniciaba entonces el juego de la persecución de todos contra seis. La renta menguaba a medida que el pelotón giraba del interior de la provincia de Cádiz a la costa. Por el nuevo segundo puente de Cádiz, sin inaugurar pero apto para el paso de la caravana ciclista, el retraso del grupo que entonces dirigía el Tinkoff era de apenas 3 minutos.
Los vientos gaditanos pusieron en cabeza a los equipos de los favoritos, de ahí que se dejaran ver el Sky, Movistar, Katusha y Astana para evitar sustos e ir preparando la aproximación a la cuesta final de Vejer.
Antes hubo que derribar la fuga, hecho que se produjo a 11 kilómetros de Vejer, cuando Irízar y Engoulvent despertaron de un sueño irrealizable tras más de 200 kilómetros al frente de la carrera.
La cita estaba marcada en el ascenso final a Vejer de la Frontera. Dos kilómetros, pero "ratoneros", con rampas del 14 por ciento que seleccionaron a los más fuertes. El Tinkoff entró "a cañón" en la cuesta definitiva, pero el Katusha, con Alberto Losada seleccionó el grupo.
Roche trató de sorprender de lejos, así como Roche, pero el último repecho a 400 metros de meta les dejó sin fuerzas, que era lo que le sobraba a Valverde, que solo tuvo que acelerar a su modo para anotarse la victoria. Marca de la casa. Este miércoles se disputa la quinta etapa entre Rota y Alcalá de Guadaira, de 167 kilómetros.