España se ha convertido en uno de los países de la Unión Europea con más presencia de la variante india del coronavirus. En un momento en el que las restricciones disminuyen y avanza el proceso de vacunación, la expansión de esta cepa preocupa a los expertos por un posible incremento de los contagios.
Casi el 10% de las muestras secuenciadas en nuestro país corresponden a la variante delta, anteriormente conocida como la cepa india. El aumento de los casos ha propiciado que tres comunidades autónomas hayan anunciado que adelantan la segunda dosis de AstraZeneca a los mayores de 60 años, programada inicialmente 12 semanas después del pinchazo.
Madrid, Andalucía y Galicia son los tres territorios que adelantan este pinchazo debido a la expansión de la variante delta, que ya es dominante en Reino Unido y cuenta con grandes brotes en China, Estados Unidos o África, entre otros lugares.
En Reino Unido, los expertos aseguraron que la cepa es casi un 60% más transmisible que la variante principal detectada en el país británico. Además, preocupan sus síntomas, que incluso pueden confundirse con un resfriado común.
Precisamente, este es uno de los problemas que señalan los expertos: desde Reino Unido afirman que podrían ser similares a un resfriado común y es más difícil de identificar.
Los síntomas más señalados son los siguientes: dolor de cabeza, dolor de garganta y mucosidad. Al contrario que las otras variantes, no se ha detectado pérdida de olfato o tos como síntomas predominantes entre los afectados por esta cepa.
Tim Spector, epidemiológo del King's College de Londres, asegura en declaraciones recogidas por la BBC que las personas más jóvenes pueden sentirse como si tuvieran "un resfriado fuerte" y los síntomas clásicos del Covid-19 ahora son menos comunes.
Así, Spector señala que la fiebre sigue siendo bastante común, mientras que la pérdida de olfato no aparece entre los principales síntomas.